Página Siete
Dos leyes clave y más de 50 acciones que realizó en un año de gestión la anterior Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) legitimaron al gobierno de Jeanine Añez y desbaratan la retórica del golpe de Estado. Mientras que desde el partido azul insisten en esa versión.
Las dos leyes clave que sancionó el Legislativo, en las que el partido azul tenía dos tercios, son la Ley 1266, puesta en vigencia el 24 de noviembre de 2019, y la Ley 1270, puesta en vigencia el 20 de enero de este año.
La Ley 1266 dejó sin efecto legal las elecciones del 20 de octubre de 2019 y dispuso la realización de nuevos comicios (en los que fue electo Luis Arce), además que estableció la elección de los nuevos vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y de los tribunales departamentales.
En tanto que la Ley 1270 dispuso prorrogar el mandato de la presidenta, de los legisladores de la ALP hasta la posesión de las nuevas autoridades para el periodo 2020-2025.
El investigador jurídico Franz Rafael Barrios Gonzales comenta que ambas leyes, junto al comunicado que emitió el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) el 12 de noviembre de 2019, “blindaron” la sucesión presidencial de Añez y desbaratan la retórica del golpe.
“Queda probado que el comunicado del TCP sobre la sucesión presidencial, las leyes 1266 y 1270, respectivamente, y la Declaración Constitucional 0001/2020 del 15 de enero de 2020 más propiamente, ‘blindaron’ jurídicamente la sucesión presidencial de Añez, ‘matando’ el falso discurso del ‘golpe’”, sostuvo Barrios Gonzales.
El experto sostuvo que “el discurso del ‘golpe’ ‘muere’ jurídicamente con la Declaración Constitucional 0001/2020 del 15 de enero de 2020, que avaló la Ley excepcional de prórroga del mandato constitucional (sancionada por el MAS)”.