Página Siete
Rituales con hoja de coca, cánticos y música andina se apoderaron la mañana de este domingo de la frontera entre Bolivia y Argentina, en la víspera del esperado regreso de Evo Morales a su tierra, casi un año después de haberse marchado luego de renunciar como presidente en mitad de la crisis política desatada por el fraude electoral detectado por la OEA en los comicios de 2019.
«Hoy, después de un año de exilio, Evo ha iniciado el camino de retorno a Bolivia. Desde esta cuenta, intentaré narrar nuestro viaje desde Buenos Aires hasta Chimoré», compartió en su cuenta de Twitter el exembajador de Bolivia ante la ONU, Sacha Llorenti.
Morales se trasladó desde Buenos Aires hasta Jujuy, desde donde irá por tierra hasta La Quiaca, para cruzar mañana la frontera con Bolivia, acompañado de una caravana que lo escoltará hasta Chimoré.
En Villazón, habitualmente una tranquila ciudad del sur de Bolivia fronteriza con Argentina, la fiesta de los seguidores del expresidente estalló desde este domingo con los primeros simpatizantes llegados desde distintos puntos del país para no perderse el histórico retorno de su líder.