Agencias
En un inusual y emotivo discurso ante el parlamento, la canciller alemana Angela Merkel pidió este miércoles aceptar mayores restricciones ante la segunda ola del convid-19 en Alemania que este llevó las muertes diarias a 590, un récord en el país desde col comienzo de la pandemia.
La canciller pidió adelantar las vacaciones escolares y restringir las reuniones y contactos personales en los días previos a la Navidad, así como mantener loes negocios cerrados hasta el 10 de enero, siguiendo las recomendaciones de los epidemiólogos para detener los contagios.
Merkel, reconoció este miércoles que las vacunas que se puedan distribuir en los tres primeros meses de 2021 no serán suficientes para suponer un “cambio significativo” a nivel epidémico en el país.
La canciller realizó estas declaraciones al intervenir ante el pleno del Bundestag (cámara baja) para defender los presupuestos del año que viene, que prevén un endeudamiento nuevo de 180.000 millones de euros para combatir la crisis desatada por el coronavirus. En su mensaje, instó a los legisladores a aprobar nuevas restricciones para los próximos días, en la víspera de las fiestas de fin de año, en momentos en que el país batió sus récords de muertes diarias por el covid-19.
Asimismo, resaltó que las vacunas que se puedan poner en los tres primeros meses de 2021 no serán suficientes para suponer un “cambio significativo” a nivel epidémico en el país. No obstante, la canciller subrayó que si se puede empezar a vacunar a los grupos vulnerables y al personal sanitario a partir de primeros de año “se habrá ganado mucho”.
Según aseguró, se puede ver la “luz al final del túnel” con varias vacunas contra la covid ya a punto de ser autorizadas en la Unión Europea (UE), pero recordó también que Alemania se encuentra actualmente en la “fase decisiva” de la pandemia, en una segunda ola “mucho más exigente que la primera”, y que la experiencia histórica advierte de que las segundas pueden ser “muy dolorosas”.
Merkel habló con una mezcla de sentimientos, por todo lo logrado en apenas diez meses de pandemia -por ejemplo en el ámbito científico-, pero advirtiendo de las grandes dificultades que quedan aún por delante.
“El numero de contactos es demasiado alto, la reducción de contactos no es suficiente”, argumentó Merkel en referencia a las restricciones aprobadas para noviembre, que luego se endurecieron y prolongaron hasta diciembre. Por eso, en un discurso inusualmente emocional de la canciller, instó a aplicar nuevas restricciones en los próximos días para reducir el número de nuevos contagios y, consecuentemente, el de hospitalizados y muertes por la covid.