El candidato de UNIDAD Samuel Doria Medina estuvo presente en el Foro Agropecuario de la Confederación Agropecuaria del Oriente (CAO), que se realizó el 25 de junio en Santa Cruz de la Sierra. “Yo no vengo a hablarles como un político. Vengo a hablarles como lo que soy: un emprendedor. Sé lo que significa construir algo desde cero y dar empleo a otras personas. Soy el único candidato que lo sabe”, señaló. Ofreció, en consecuencia, un gobierno abierto a los empresarios agropecuarios y de otros sectores, y también a la sociedad en general.
“Sé que lo que le duele a los emprendedores es tener que trabajar con un Estado en contra. Un Estado que prohíbe exportaciones, que fija precios por decreto, que extorsiona a través del INRA o el SENASAG, que no controla los avasallamientos ni los bloqueos.
Un Estado que no asegura la provisión de combustibles, que no garantiza los insumos básicos para que los bolivianos puedan trabajar. Nuestro gobierno será diferente”, señaló.
Ratificó su compromiso de resolver la crisis de dólares e inflación en 100 días con un plan integral que estabilice la economía y el tipo de cambio.
Y propuso las siguientes medidas para la agropecuaria:
- “Acabar con la incertidumbre sobre la propiedad de la tierra. La distribución y el saneamiento de la tierra debe ser un proceso transparente y basado en la ley. Recomenzar la ágil entrega de títulos de propiedad, que ha sido suspendida en este tiempo de arbitrariedad. Realizar una titulación masiva y digitalizada. Garantizar la propiedad privada. El que invierta en Bolivia tendrá la certeza de que su tierra y su trabajo se respetarán. Todo esto se sintetiza en una consigna: tolerancia CERO a los avasallamientos”.
- “Impulsar un shock de tecnología y riego”.
- “Crecimiento de la frontera agrícola, pero no a plan de fuego y gasolina. Abrogar las leyes incendiarias”.
- “Hacer todas las reformas necesarias (tanto legales como estructurales) para liberar las exportaciones agropecuarias, garantizando que los exportadores puedan seguir trayendo dólares a Bolivia”.
- “Refundar el Instituto Nacional de Reforma Agraria y todos los organismos estatales relacionados con la agropecuaria para que dejen de estar parcializados, politizados y plagados de corrupción. El INRA, la ABT y el SENASAG dejarán de extorsionar a los productores”.