La exministra de Relaciones Exteriores, Karen Longaric informó que el 2018, el gobierno de Evo Morales aceptó la tesis planteada por Chile, que indica que las aguas del Silala son de curso internacional. Señaló que el gobierno del MAS sostuvo una mentira a costa del pedido de Potosí.
“Cuando la delegación boliviana ante La Haya ya había tomado una decisión de allanarse a la tesis chilena, en agosto del 2018, presenta la contramemoria y reconoce que la tesis chilena es la correcta, que el Silala es agua de curso internacional. Aún así trataron de mantener una mentira al pueblo boliviano por varios años”, explicó la experta en relaciones exteriores, en una entrevista con TVU.
Longaric recordó que cuando Chile conoció la contramemoria presentada por Bolivia, el excanciller chileno “(Roberto) Ampuero declaró que estaba complacido porque Bolivia se había allanado a la tesis chilena”.
La autoridad alegó que se enteró de esta situación cuando fue designada ministra (noviembre de 2019) y quedó “impactada”, por lo que informó de esta situación. “Fui acusada al estilo masista, endilgándome a mí la responsabilidad”, acotó.
Longaric lamentó la conclusión de La Haya, por Potosí. “Las expectativas del pueblo potosino eran legítimas y dignas de respetar; sin embargo, a don Evo Morales nunca le interesó las expectativas o los derechos intrínsecos de los pueblos”, acotó.
“Cuatro años han sostenido lo insostenible, han ido aferrándose a una postura, simplemente por cuidarse políticamente de los efectos que políticamente pudo haber tenido esto”, sostuvo.
En 2016 Chile presentó una demanda contra Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), pidiendo que se declare al Silala como un curso de agua internacional. El 2017, Bolivia toma conocimiento de los datos legales y periciales, para preparar la contramemoria, misma que fue presentada en 2018.
En la contramemoria de 2018, el gobierno admitió que las aguas del Silala “fluyen de forma natural” y pidió compensación por el uso de las aguas que fueron desviadas artificialmente.
El pasado jueves, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya concluyó que le Silala es un río de curso internacional y subrayó que Bolivia no declaró durante la demanda que Chile le deba compensación por los usos pasados de esas aguas.
Página Siete